LA TÉCNICA BOWEN

Movimientos suaves aplicados a los músculos y tejidos a intervalos de tiempo espaciados es lo que caracteriza a la técnica Bowen. Los impulsos neurológicos que crean estos movimientos envían señales al cerebro para “reajustar” el área y recobrar el movimiento normal en las articulaciones, los músculos y los tendones.

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La técnica Bowen actúa primordialmente sobre el cuerpo a través de los sistemas nerviosos y bioenergéticos, lo cual resulta en un estado de equilibrio efectivo y siempre libre de dolor.

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Este método suave y discreto para estimular la capacidad propia del cuerpo para curarse refleja el principio homeopático de “menos es más”. Igual que la homeopatía, la curación viene desde adentro con lo cual el equilibrio que se logra es siempre profundo y a menudo puede transformarle la vida.